Todo sobre Margo Baridon

Unos días atrás Margot Baridon me abrió las puertas de su lugar. Showroom para sus clientas amigas, y el lugar en donde diseña. Pude ver la última colección, ordenada cromáticamente en un extenso perchero, que ocupaba toda una pared de la habitación. Maniquíes posando con nuevas ideas, imágenes de proyectos anteriores y los cuadernos de diseño, con muestras de telas, cientos de imágenes y una fuerte impronta manual.

A pocos días de la MoWeek, Margot estaba muy atareada. Aún así se la veía muy tranquila, con todo organizado y encaminado, y con la música acompañándola en todo momento. Ella se destaca por su constante labor, su perfeccionismo, su mente creativa, inquieta y a la vez, sumamente empresarial.

Desde chica le diseñaba la ropa a sus barbies y pasaba las páginas de las revistas de moda con gran admiración, sin saber que eso sería una semilla que germinaría con el tiempo. A los 18 años comenzó a explorar su creatividad junto a una amiga, sin ningún concepto pre establecido en el diseño, haciendo ropa para una marca a la que llamaron “As de Pique” y que hoy recuerda con mucho cariño.

Su facilidad para los números la inclinaron, a la hora de elegir su carrera, en hacer en forma paralela, la Licenciatura en Diseño de Modas en la ORT y Administración de Empresas. Admirable.

Margot afirma que su facultad de diseño fue muy completa en la parte técnica, por lo que optó por viajar al viejo mundo con el fin de reforzar la parte conceptual de la moda. En St.Martins en Londres y en la KADK en Copenhague se nutrió con nueve cursos, entre otros: “Creating new concepts in fashion”, “Draping womenswear design” y “Digital textile design”, que cambiaron por completo su método creativo.

Se largó al mercado años atrás con Fashion Box, marca de cuellos y collares, junto a Cecilia Mendlowicz, con el objetivo de realzar el estilo cotidiano de las uruguayas con un toque distintivo. Si bien hoy en día la marca no sigue vigente, asegura haber sido una gran experiencia de aprendizaje además de haber conocido a fieles clientas.

Sin embargo, los accesorios no la hacían sentir totalmente completa a la joven de veintisiete años, y después de confeccionar algunas prendas a pedido, decidió largarse a producir en serie y en base a colecciones. De ahí surgió su propia marca Margo Baridon. Si bien no le resultó fácil asimilar que su nombre pasaría a ser su propia marca, por la gran exposición que eso supone, resultó ser lo más real y natural.

Hoy en día su marca se encuentra en casa Baném, aunque la meta a largo plazo es trascender las fronteras para promover la moda uruguaya en el mundo. A corto plazo, el objetivo es lanzar su página web con e-comerce. Como dicen los italianos, “piano piano, si va lontano”.

Confort, calidad, elegancia, actualidad y autenticidad, son algunos de los tantos adjetivos que definen la firma que atrae a mujeres de un amplio rango de edades. ¿Cómo consigue ese target tan extenso? El amor por el diseño, la confianza, la sensibilidad, la valoración por la calidad y la búsqueda de toques distintivos no tienen base ni límite de edad.

Mientras me mostraba las fotos de su campaña le hice, la que yo considero, mi pregunta clásica: si se siente identificada con el estilo de su marca. Aseguró que, si bien no diseña para ella, sería capaz de ponerse todo lo que hace.

Una de las cosas más importantes a destacar, es que Margot es una diseñadora con valores: no solo prioriza los materiales nobles, sino que manda determinadas prendas a estampar a EEUU a lugares cien por ciento orgánicos, por que le resulta sumamente importante que los diseñadores tomen conciencia del medio ambiente.

Admite no haber sido un tema fácil, pero las prendas superiores para su última colección fueron hechas a mano en Uruguay con el objetivo de apoyar la industria nacional. Indudablemente todo esto le da a sus colecciones un legítimo valor agregado además de ser un aprendizaje y una gran tranquilidad, poder controlar el proceso de fabricación.

La colección otoño-invierno 2016 fue inspirada en la arquitectura vanguardista contemporánea de Ørestad, barrio en Copenhague donde Margo tomó fascinantes imágenes que se convirtieron en parte de los estampados, y el nombre de la línea fue bautizado en su honor.

Esta nueva colección compuesta por 27 piezas fue la elegida por la MoWeek para la campaña de la próxima edición y para el desfile de cierre, lo cual la ha llenado de orgullo. Lo más desafiante para la diseñadora fue tener que adaptar la línea al evento, haciendo que sus prendas se amolden tanto a la pasarela, como a su stand de ventas.

¿Qué más les puedo contar acerca de esta colección? Esta compuesta por estampados totalmente inusuales y con impronta Baridon. Los tapados son prendas de sastrería de paño de lana con una silueta masculina sin perder la femineidad y para los plenos utilizó gabardina, algodón-lycra y acentos metálicos.

Margot es una diseñadora que, desde su desfile en Proyectarse, siempre tuve inquietud por entrevistar, porque desde que llegué a Uruguay en 2012, veía mucha ropa y poco diseño. Ella tiene un proceso creativo alternativo, que le dan a cada prenda un sello que la hace auténtica y capaz de ser reconocida a la distancia, destacándose del resto. Sin duda es mi preferida.

The Strawberry Blonde